kvass (o kvas) es una bebida fermentada tradicional de Europa del Este, especialmente popular en Rusia, Ucrania y otros países de la región. Se elabora a base de pan de centeno, harina o malta, aunque también se puede hacer con remolacha, frutas o hierbas. Tiene un sabor agridulce y ligeramente efervescente, y aunque tiene un bajo contenido de alcohol, se considera una bebida refrescante.

Origen: Es una bebida eslava y báltica con una larga historia, utilizada desde la Edad Media.

Los ingredientes básicos son pan de centeno seco o malta de centeno/cebada. A veces se añaden miel, hierbas, especias, remolacha o frutas.

Proceso: Se crea a través de la fermentación, donde se añade levadura o masa madre al pan o la remolacha con agua, lo que genera burbujas y el sabor característico.

Sabor: Su sabor es agridulce, con una ligera carbonatación.

Usos: Se bebe directamente como refresco, pero también se utiliza como base para sopas frías tradicionales rusas, como la okro shka.