Pilsner Urquell es la primera cerveza rubia pilsener de la historia. Su característico aspecto dorado y su sabor refrescante son todo un referente de uno de los estilos de cerveza más populares del mundo.

Pilsner Urquell se elabora de la misma manera desde hace más de 175 años y solo se usan ingredientes procedentes de la República Checa, como lúpulo Saaz, cebada de Moravia y agua blanda de Plzen. El lúpulo Saaz añade el toque amargo.

La maduración se lleva a cabo en los almacenes subterráneos de la fábrica, en tanques de acero a temperatura controlada. El resultado es una cerveza de color dorado brillante y aroma y sabor suave, ligero y muy equilibrado.